¿Qué Hacer Cuando Me Siento Vulnerable?

El temor a ser herido o lastimado es una de las situaciones que afectan a cientos de personas, si eres tu una de estas te interesara  saber las estrategias que aplico cuando me siento vulnerable.

Antes de entrar en detalle con los mejores consejos o recomendaciones para aprender como dejar de ser vulnerable, considero importante tener claro el concepto de vulnerabilidad.

Esta trata básicamente de la cualidad que posee una persona para poder ser herido física o moralmente, según sea su capacidad para prevenir, resistir y/o sobreponerse al impacto de tal daño.

En otras palabras, una persona vulnerable es aquella que no cuenta con tal capacidad y que por lo tanto se encuentra constantemente en situación de riesgo, o al menos eso cree y siente.

Por lo general, suelen ser los niños, mujeres y ancianos considerados los más propensos a la vulnerabilidad, mientras que los hombres por carencias o diferencias físicas se consideran que están preparados para enfrentar ciertas amenazas.

Un ejemplo claro de vulnerabilidad podrían ser las personas en condición de calle, quienes están expuestas a padecer enfermedades, robos, ataques, etc.

Ahora bien, no es esta la única situación en la que podemos llegar a sentirnos vulnerables, por ello, he reunido para ti los mejores consejos y recomendaciones, para que al igual que yo sepas…

Qué Hacer Cuando Me Siento Vulnerable

A continuación te detallo algunas de las estrategias y/o claves que he puesto en práctica para manejar la vulnerabilidad espiritual o en cualquier otro ámbito de la vida, que posiblemente puedan servirte de gran ayuda:

• Aceptar La Vulnerabilidad:

La vulnerabilidad es parte de la personalidad y esencia de cada ser humano aunque esto implique que no siempre se va a estar feliz, de buen humor y seguros de sí mismos.

Por ello, lo ideal siempre será aceptar las cosas tal como son, incluyendo nuestras capacidades, sentimientos y temores, aceptando la vulnerabilidad como una de tus cualidades.

• Mostrarte Tal Como Eres:

Una de las cosas que he aprendido en lo que respecta a esto de manejar la vulnerabilidad es a mostrarme tal y como soy, permitir, sin temor alguno a que otros me vean vulnerable, imperfecto e incluso hasta cuando me siento triste.

Por ninguna razón pretendo mostrarme perfecto o simplemente como a otros les gustaría que fuera, procuro ser siempre autentico, siendo yo mismo y no lo que otros quieren o esperan que sea.

• Creerte Capaz:

Absolutamente todas las personas contamos con diferentes capacidades innatas y/o naturales que podemos utilizar a favor, es decir, sacar el mayor provecho de ellas para desarrollar todo el potencial y transformarnos en personas, plenas, satisfechas y motivadas, y para ello basta simplemente creer en ti mismo.

• Ten El Coraje Para Asumir Tus Imperfecciones:

Una de las mejores actitudes que puedes poner en práctica cuando te sientes vulnerable es sin duda, el coraje; esa fuerza de voluntad que te impulsa a continuar y/o avanzar a pesar de las dificultades y los temores.

Esto implica no solo preservar con las acciones que te conducen hacia tus objetivos o sobreponerte a las circunstancias y trabas que puedas tener durante el proceso, sino también permitirte, aceptar y asumir tus errores e imperfecciones para seguir creciendo.

• Cultiva La Auto-compasión:

Algo que no todas las personas tienen claro es el concepto de compasión, muchos creen que se trata de sentir lástima o pena por si mismos o por otros.

Ser compasivos es simplemente darnos cuenta del sufrimiento, pena o dolor del otro y a partir de allí hacer lo que esté en nuestro alcance para ayudarle a mitigar tales sentimientos.

Al ser vulnerables, debemos no solo ser compasivos, flexibles y ecuánimes con otros sino incluso con nosotros mismos, permitiéndonos sentir de tal modo pero aun así sacar la fuerza necesaria para continuar.

Lo que aprenderás con esto es que la vulnerabilidad que te caracteriza te ayudara a valorar lo que eres y lo que tienes, siendo consciente de ello comenzaras a vivir tu presente de una forma plena.

Deja atrás esas creencias que al pasar de los años la sociedad ha inculcado, haciéndonos creer que lo ideal es mostrarnos siempre fuertes, reprimiendo cada una de nuestras debilidades.

Toma en cuenta que tus cualidades y debilidades son las que forjan en ti el ser humano que eres, diferente a cualquier otro. Cuando al fin reconozcas y aprendas a manejar tu vulnerabilidad, a reconciliarte con tus imperfecciones y errores serás capaz entonces de aceptarte y valorarte tal como eres.

Contrario a esto, si acostumbras a reprimir tus miedos y mostrarte ante otros como lo que no eres por el simple hecho de temer ser rechazado, te estarás condenando a una eterna insatisfacción.

Por lo tanto, te invito a poner en práctica estos consejos que suelo practicar cuando me siento vulnerable, te aseguro que te serán de gran utilidad para llevar una vida más plena y satisfactoria.